Por Isai del
Carmen San Miguel[1]
Para
una buena redacción o escritura, se consideran diferentes factores para lograr el entendimiento de lo que se quiere expresar o señalar. Uno de los
factores o reglas de ortografía que podemos emplear para una buena redacción es
el uso de las mayúsculas. La Real Academia Española (RAE) publicó el Diccionario
panhispánico de dudas[2], conocido
como DPD, en el 2005. En el apartado del uso de las mayúsculas, se destaca cuestiones
formales generales, uso de mayúsculas en palabras o frases enteras, uso de
mayúscula inicial exigido por la puntuación y uso de la mayúscula inicial
independientemente de la puntuación. A continuación, se señalará brevemente
algunos contextos importantes para el uso o no uso de las mayúsculas:
¾
Se utiliza mayúscula para los nombres propios como
antropónimos, topónimos.
¾
No se utiliza mayúscula cuando los nombres propios han
pasado a ser nombres comunes, por ejemplo: donjuán, celestina, etc.
¾
Se utiliza mayúscula los nombres de entidades e
instituciones, por ejemplo: Ministerio de Salud, Organización de las Naciones
Unidas, etc.
¾
Se utiliza en mayúscula cuando el artículo forma parte
del nombre, por ejemplo: La Habana, El Salvador, etc.
¾
No se utiliza mayúscula para los cargos o empleos como
por ejemplo: rey, papa, etc.
¾
Se utiliza mayúscula para los nombres de dioses,
profetas y otras entidades espirituales.
¾
Se utiliza mayúscula para las designaciones de forma
estilística a algunos topónimos, como por ejemplo: la Ciudad Eterna (Roma), el
Nuevo Mundo (América), etc.
¾
Se utiliza mayúscula cuando se trata de un periodo
histórico o movimiento histórico.
¾
Se utiliza mayúscula para la primera palabra del
título de una película o libro.
¾
Se utiliza mayúscula para los nombres de periódicos y
revistas, por ejemplo: El Comercio, La República.
¾
Se utiliza mayúscula para los títulos de los libros
sagrados.
¾
Se utiliza mayúscula para designar disciplinas de
estudio solo en el ámbito académico.
¾
Se utiliza mayúscula a inicio de palabra para los
nombres científicos.
¾
Se utiliza mayúscula para los nombres de torneos y
premios.
¾
Se utiliza en mayúscula los nombres de los signos
zodiacales.
¾
No se utiliza mayúsculas para señalar los nombres de
leyes científicas. Es preciso que si el nombre de la ley tienen un nombre
propio, este sí empleará el uso de la mayúscula. Por ejemplo, la ley de Ohm.
¾
Se utiliza mayúscula cuando se utiliza el nombre
propio de un autor para hacer referencia a su libro, pintura, etc. Por ejemplo:
“Tengo varios Picasso en casa”.
¾
No se utiliza mayúscula para los nombres de monedas.
¾
Se utiliza la mayúscula en siglas y en algunos
acrónimos, como por ejemplo: ONG, ONU, OEA, ADN, CD, FBI, HTML, etc. Cabe
señalar que no se utilizan mayúsculas en algunos acrónimos cuando estos han
sido sustantivados (como por ejemplo: sida, vip, etc.) y que estas a partir de
cuatro letras solo va la letra inicial con mayúscula, por ejemplo: Unesco.
¾
No se utiliza la mayúscula para el nombre de las
lenguas y de los pueblos originarios.
¾
Se utiliza mayúscula para las inscripciones de lápidas
y monumentos.
¾
Se utiliza mayúscula después del uso del punto.
¾
Se utiliza mayúscula cuando después de los puntos
suspensivos se cierra el enunciado, si no lo hace se no utilizará la mayúscula.
¾
Se utiliza mayúscula después de los dos puntos cuando
es el saludo de una carta, documento o cita.
¾
Se utiliza mayúsculas después de los signos de
pregunta o exclamación cuando sus signos equivalen al punto.
¾
Se utilizan mayúsculas para escribir los números
romanos.
¾
No se utiliza mayúscula para los nombres de las notas
musicales.
¾
No se utiliza mayúscula para los nombres de los días
de la semana y de los meses, solos si estos formar parte de nombres propios.
¾
No se utiliza mayúscula para los nombres de las
religiones.
¾
Es preciso señalar que las palabras con uso de
mayúsculas no están exceptas de la regla de tildación. Es decir, a pesar de que
estén escritas en mayúsculas deben de llevar tilde.
Con
lo descrito podemos observar que el uso de las mayúsculas no solamente se
presenta para los nombres propios o para la letra de inicio de un texto, sino
que presenta una mayor cantidad de casos para su utilización.
Referencia
REAL ACADEMIA
ESPAÑOLA & ASOCIACIÓN DE ACADEMIAS DE LA LENGUA ESPAÑOLA. (2005). Diccionario
panhispánico de dudas. Madrid: Santillana.
[1] Estudiante de décimo
ciclo de la E. A. P. de Lingüística de la Universidad Nacional Mayor de San
Marcos con experiencia en docencia y manejo de grupos. Interesada en estudios
sobre castellano y metodologías de enseñanza de segunda lengua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario